Si me hubiera dedicado a la fotografía también sería un pringao pero por lo menos sería mas feliz. De vez en cuando, por una mera cuestión de probabilidades, saco alguna foto pasable. Normalmente con la cámara de toda la vida, con la digital es más raro. Será que no me termina de convencer, pero aquí hay una de mi visita a Córdoba. El truco es fotografiar algún monumento iluminado de noche, hay que ser muy muñones para que no te salga una foto bonita.
En la Biblioteca Nacional hay una exposición de Jordi Socías, del que habré visto cientos de fotos en el El País Semanal.
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2 comentarios:
Muy buena, mancuso, de vez en cuando merece la pena ir todo el rato haciendo de "tonto la cámara"
Gracias chasky, siempre he sido el tonto la cámara
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